PRESENTACIÓN

Es una alegría para mi, el poder introducirles a ustedes las glorias del brahmacarya. Brahmacarya es la vida de un estudiante célibe que recién comienza a comprender cual es la responsabilidad de haber nacido en un cuerpo humano. Generalmente se asocia la practica de brahmacarya con la vivencia en Gurukula, la escuela del Guru, o la vivencia en un ashram, bajo los estrictos principios de la vida monástica. En sinopsis se puede decir que brahmacari o brahmacarini es un hombre o una mujer estrictamente célibe que usa su tiempo para servir a su maestro espiritual, para servir a los Vedas y a toda la humanidad. El concepto brahmacari también tiene otras aplicaciones prácticas, por ejemplo, se usa el termino grihasta brahmacari para aquellas parejas que usan la vida sexual única y exclusivamente para invitar hijos a sus familias y al mismo tiempo son muy dedicados al servicio de los ideales espirituales. Swami BA. Paramadvaiti

lunes, 16 de febrero de 2009

La más importante regla de protección.



En el ashram del maestro espiritual hay reglas y valores que nos protegen y nos enseñan a cuidar nuestra castidad más allá del impulso de los sentidos, o de la tentación que las distintas formas de la ilusión nos ofrece.
La más sencilla e importante de todas estas reglas de protección, es que hombres y mujeres que no son casados no deban hablar a solas entre ellos en sitios privados; y se recomienda que se mantengan siempre visibles hacia los otros miembros de la comunidad, incluso en el caso de requerir una conversación mas personal. Esta es una regla sagrada. ¿Porqué lo será? ¿Porqué la gente no es de confianza? No, Srila Harijan Maharaja respondió a esta pregunta en una forma muy apropiada: "Yo creo en ti, pero no creo en Maya, no creo en la ilusión".
No se trata de desconfiar personalmente de alguien en particular. En las escrituras aprendemos que hay cuatro tipos de defectos que cubren al alma condicionada. Estos son: la tendencia a cometer errores, la tendencia espontánea a engañar o a mentir, la tendencia a quedar controlados por la ilusión y la tendencia a perder el control de los sentidos o la incapacidad de los mismos.
Este análisis nos permite concluir que nuestra situación en el estado condicionado es débil y precaria, pues estamos constantemente expuestos a ser arrastrados por cualquiera de estas tendencias. Al estar así expuestos, nuestras capacidades se ven afectadas de modo tal que muchas situaciones o decisiones quedan mas allá de nuestro alcance, incluso, más allá de nuestra propia voluntad o determinación. Es por eso que las personas que realmente valoran su vida espiritual toman esta recomendación como algo muy importante y no como un consejo fanático, si no más bien como la luz que nos muestra el camino más seguro para transitar. Uno debe ser cuidadoso entonces de procurar mantener intacta su conducta personal en relación al sexo opuesto siguiendo esta regla tan fundamental.
Entonces, para que uno esté bien en el cultivo de su conciencia devocional, en su brahmacarya, uno necesita una buena protección espiritual. Esa protección desciende cuando el devoto desarrolla una actitud humilde, acompañada de un profundo sentimiento de rendición y además está plenamente ocupado en el servicio del maestro espiritual.